Son muchos los golpes y caídas sufridos por los recogepelotas. Especialmente, en estos últimos días hemos oído dos noticias que me han llamado especialmente la atención:
Un recogepelotas se da un porrazo contra la pared durante un partido de Almagro
Por lo que parece el chaval, menor de edad, se tropieza después de recoger las pelotas al volver a su puesto con una pequeña alfombra que hay en el suelo junto a la pared. Al tropezarse se golpea la cara contra la pared. Por suerte ésta era blandita y parece que no se hizo mucho daño pero:
¿Existen evaluaciones de riesgos para este tipo de profesiones?
En este caso tuvimos una caída de personas al mismo nivel y golpe contra objeto inmóvil. Además, debemos tener en cuenta que se trata de un menor de edad, por lo que debe estar especialmente protegido. Por las consecuencias del percance, dónde afortunadamente el recogepelotas salió ileso, podríamos decir que se trató simplemente de un incidente, que quizá merezca la pena analizar y tomar medidas para evitar que ocurra algo peor. Sería fácil eliminar o colocar mejor la alfombra con la que tropezó el susodicho para evitar futuros tropiezos. Hay que aprender de los incidentes…
Un juez de línea recibe un raquetazo en la cara y tiene que se atendido
Sucedió ayer, en el torneo Conde Godó, un juez de línea es golpeado de forma no intencional por el tenista con su raqueta. El juez de línea quedó algo conmocionado y perdió dos dientes. El juez de línea abandonó el campo conmocionado y con la dentadura afectada. En esta ocasión si que hablamos de accidente de trabajo que podríamos clasificar como golpe por objeto o herramienta o golpe con objetos móviles. ¿Qué se podría hacer para evitar o reducir este tipo de riesgos? La respuesta la dejo a vuestros comentarios.